sábado, 22 de junio de 2013

Tome nota

-Qué alegría volver a saborear un triunfo después de tantas lunas. Un gran triunfo rojo, ante un rival directo en la lucha por la baja -increíble- y que nos aúpa en la tabla. Ojalá esto sirva para iniciar la recuperación con o sin Bakero...

-Buen gol de "Arrocito" Sánchez. Se acordó cuando aparecía como una figura con futuro y la definió a lo grande ante Juan Flores, tras un buen centro de Oscar Vílchez a quien Bakero puso en la banca. Otro desacierto del técnico español....

-Buena cantidad de público en el estadio de Moyobamba y por supuesto no faltaron los hinchas aurichistas quienes alentaron al equipo a todo pulmón. Al final, y como en los buenos tiempos, se fueron felices con la victoria que nos aleja de los últimos lugares...

-Aurich jugó con la chompa blanca, pantalón rojo y medias rojas. El uniforme trajo suerte al equipo. Ahhh, lo bueno es que Bakero estuvo calladito y no metió la pata como en otras veces...

-Qué buenos centros ejecuta el juvenil Josué Estrada. Son auténticos tiros de esquina generando oportunidades de gol. Es una de las buenas figuras que tiene el plantel aurichista...

-Los jóvenes que actuaron ante Unión Comercio dieron la talla. Edson Díaz, Estrada e Italo Regalado tuvieron un gran partido y la rompieron frente a los selváticos. Díaz fue, incluso, el mejor en el primer tiempo...

-De acuerdo a los medios capitalinos, la directiva aurichista le dio un ultimátum de dos partidos. Ya ganó uno y el viernes se juega la cabeza frente al Gálvez. En las tribunas hacen barra Oblitas, "Chemo" y "Bolillo" Gómez...

-Bonito gesto de los muchachos al juntarse y abrazarse al final del partido, evidenciando que están unidos pese a las derrotas y el clima inestable que vive el plantel con tantas derrotas y empates. Con ese mismo ímpetu se deben jugar los próximos partidos...

-Roberto Ovelar recibió harto y tupido. Los jugadores selváticos se esmeraron más en patear que en jugar y el "Búfalo" fue el primer objetivo...

-Viene Gálvez el viernes y hay que ganarlo como sea. Un triunfo y nos pone otra vez en la carrera por los primeros puestos aunque, en honor de la verdad y pese a la emoción que nos embarga, estamos muy lejos. ¡A no bajar la guardia, muchachos!...

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